Viento amigo,
que por un instante eterno
pintaste mi sueño
de pájaro alado.
Creaste mis plumas,
mi vuelo callado,
me alzaste imparable
sin despertar al cielo.
Fui por tí,
pude ser,
aquello que hasta ahora
no me estaba permitido.
Fui más.
Fui la esencia
de ese anhelo profundo
que en mi calma,
estaba retenido